Los políticos españoles también se inventan sus currículums.

El mes pasado la sociedad alemana se vio escandalizada al conocer la noticia de que su ministro de defensa, Karl Theodor zu Guttenberg había copiado dos tercios de la tesis doctoral que entregó para conseguir el doctorado. En un principio el entonces ministro de Defensa alemán negó las acusaciones, sin embargo acabó dimitiendo ante las presiones de la Fiscalía de Bayreuth.

Algo muy distinto ocurre aquí en España donde, según denuncia el diario ABC, figuras de la política se ven salpicadas constantemente de acusaciones de falsificación de currículos sin que tenga ningún tipo de consecuencias. Un claro ejemplo es el que vivimos hace dos semanas cuando se dió a conocer que la vicepresidenta de la Generalitat Catalana, Joana Ortega, nunca se había licenciado en Psicología tal y como figuraba en su currículo vitae. Ortega se limitó a declarar que se debía a "un error de transcripción", y tras disculparse con Artur Mas el Parlamento Catalán dio carpetazo al asunto.

El ejemplo de España

Otra penosa costumbre de nuestros políticos a la hora de 'decorarse' el c.v. pasa por aludir "estudios en...", una técnica utilizada por el vicesecretario general del PSOE José Blanco, y que como declaraba otro dirigente del PSOE "significa que te pasaste por clase un par de días y otros tantos visitaste el bar de la facultad".

Entre nuestros actuales gobernantes destaca el caso de Carme Chacón, quien se atribuyó el doctorado en Derecho en su currículo como ministra de Vivienda -remarca el diario de Vocento-. Lo cierto es que la falsa información, lejos de suponer su dimisión apenas tuvo eco. Hoy es una de las principales candidatas a suceder al presidente del gobierno.
Pero los falsos currículos no sólo se encuentran en la primera línea de política. habrá que remontarse a los tiempos del ánclito Luis Roldán, quien llegó a Director General de la Policía con todos los honores y con la vitola de un hombre muy preparado. Se presentó ante todo el mundo como Licenciado en Empresariales e Ingeniero sin levantar las más mínimas sospechas hasta que fue encarcelado por asuntos de corrupción y se descubrió que su currículo estaba totalmente inventado.

Y es que son muchos los ayuntamientos de nuestro país que engordan sus currículos para alcanzar las ansiadas alcaldías, ya que "en pueblos pequeños nadie va a comprobar la autenticidad de sus documentos".


Un caso insólito

Algunos dirigentes, al menos tienen la decencia de dimitir al descubrirse el 'pastel', como hizo el candidato a la alcaldía de Getafe por IU, Javier Viondi. Hace diez días se descubrió que no era médico, algo de lo que se jactaba presumiendo. Al descubrirse el engaño, el partido forzó su salida.