Almunia, al contrario que Zapatero, no se atreve a pronosticar si España creará empleo este año

El próximo comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia, no se atrevió hoy a pronosticar si España creará empleo este año, aunque sí destacó que estará "más cerca" de hacerlo gracias a las medidas que se han puesto en marcha en España y en Europa y al despegue de otros países. Almunia se somete al examen de la Eurocámara para ascender a comisario de Competencia.
"Yo no sabría decir si en 2010 se va a crear empleo en España, pero sí estaremos más cerca de ese momento gracias a las medidas que se han ido adoptando en España y en Europa, a que otros países tan grandes como China tienen crecimiento alto, y a que Estados Unidos parece que espera salir de la crisis este año. Todo eso nos va a ayudar a mejorar las posibilidades de crear empleo", apuntó.

Las previsiones de Zapatero
El pasado 30 de diciembre, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, reiteró que el objetivo para 2010 es saltar de la recesión a la recuperación y de la "fuerte" pérdida de empleo a la creación de empleo neto en la última parte del año.
"La economía española se encuentra en un momento de tránsito, desde la recesión a la recuperación, que se confirmará en 2010 y que esperamos, porque este es el gran objetivo final, pueda producir empleo en la última parte del año, generar empleo neto", declaró Zapatero en rueda de prensa tras el último Consejo de Ministros de 2009.
El jefe del Ejecutivo ha ido retrasando sus previsiones de creación de empleo a medida que avanzaba el año.

Crecimiento económico
En cuanto al PIB español, el comisario europeo confió en que muestre crecimientos este año, que permitan ir a la economía recuperándose. En este punto, recordó que, cuando llegó la crisis financiera, España crecía de manera desequilibrada, con un sector de la construcción que al final se vino abajo y un elevado endeudamiento de familias y empresas.

"Todo eso requiere ahora ajustes y corregir esos desequilibrios nos cuesta más que a otros países, pero también nos beneficiamos de que otros países puedan resolver antes los problemas derivados de la crisis. Si Alemania sale de la crisis en 2010 fortalecida, eso nos va a beneficiar a los españoles", explicó.

No obstante, pidió que no se caiga en "falsas ilusiones", pues el crecimiento de 2010, avisó, "va a ser todavía débil como para generar todo el empleo que se necesita". "Por tanto, va a haber que seguir haciendo un esfuerzo más allá de 2010 porque el paro ha aumentado mucho en Europa, la cifra está en el 10%, y no estábamos así desde hace 13 ó 14 años", afirmó.

Almunia recordó que las previsiones económicas, aunque "importantes y necesarias", no son una "profecía", y menos en crisis tan profundas como la vivida. El comisario destacó que ahora que se está saliendo de la crisis, lo normal es que, a partir de un determinado momento, las previsiones se queden "cortas" y la economía se recupere algo más rápido de lo previsto. "Ojalá que sea en 2010", afirmó.

El sistema financiero y las ayudas
En cuanto a la situación de las entidades financieras, Almunia cree que una vez recuperada la normalidad, tanto los bancos que recibieron ayudas como sus accionistas deben contribuir a sufragar el gasto que supuso su salvamento.
Almunia recordó que en el caso de España, hasta ahora, ningún banco o caja ha recibido ayudas públicas. "En un momento en el que el sistema financiero estuvo al borde del colapso hubo necesidad de rescatarlo y hubo que poner mucho dinero de los contribuyentes al servicio de ese salvamento", dijo Almunia, que añadió que, ahora que se va normalizando la situación de cada entidad y de los mercados, hay que empezar a discutir cómo se va retirando la ayuda.
El hasta ahora comisario de Asuntos Económicos, apuntó que los bancos que recibieron ayudas se han visto beneficiados respecto a otros que, como estaban en mejor situación, no las percibieron.
Por eso, a los que recibieron ayudas, hay que decirles que se les pueden pedir procesos de reestructuración, que pueden implicar desinversiones o fusiones, y que "tus accionistas o tu cuenta de resultados contribuya a sufragar el dinero que ha costado tu salvamento".