España y la productividad

Un lector nos ha enviado este artículo:

España como cualquier otro país tiene numerosos problemas de todo tipo, pero aquí vamos a tratar uno de los que más daño está haciendo últimamente, que no es otro que la productividad.

La productividad en España ha sido siempre uno de los principales problemas de la sociedad. De hecho somos uno de los países donde más horas se trabajan y sin embargo somos uno de los que menos productividad tiene de toda Europa (o una de las peores). Pero...¿Por qué ocurre esto?Bueno, según mi humilde opinión, esto se debe a diferentes vicios profesionales de los que adolecemos los españoles. Voy a dar 10 claves que me parecen vitales.

1.- No existe un compromiso con la empresa. Para nosotros la empresa es el enemigo, el tirano, el que nos explota cada día sin dejarnos apenas tiempo para disfrutar de la vida... No estoy diciendo que en muchos casos esto no sea así, pero es necesario cambiar la percepción. Las empresas crean la riqueza de un país, y generan empleos. Nosotros somos parte de nuestra empresa, si esta va bien nuestro trabajo va bien, si ésta va mal, más nos vale agarrarnos los machos...
2.- No existe una verdadera motivación por hacer bien nuestro trabajo. Nos limitamos a realizarlo sin más, sin intentar buscar una mínima perfección en éste. Esto deriva en que nuestro trabajo no es de calidad si lo comparamos con el de trabajadores alemanes o escandinavos, y por lo tanto las empresas no pagarán tanto por él. Si queremos cobrar igual tenemos que trabajar igual de bien.
3.- Pensamos que nuestras vidas es el tiempo que pasamos alejados del trabajo. Esto provoca que el 60% del tiempo que pasamos trabajando es tiempo que estamos pensando en qué hacer cuando terminemos la jornada. Debemos pensar que el tiempo que pasamos en el trabajo es igual de importante que el que pasamos fuera, y que debemos aprovecharlo al máximo. Nos sentiríamos mejor con nosotros mismos y nuestros jefes nos lo agradecerían (quizás económicamente).
4.- Sentimos envidia por todo aquel que triunfa o escala posiciones dentro de la empresa. Esto nos nubla la vista y nos ofuscamos. Terminamos pensando que ha sido por enchufismo o por un designio arbitrario del jefe. No vemos la realidad, no pensamos que ha sido porque "Juanito" ha hecho mejor su trabajo, ni porque ha generado más riqueza para la empresa. Lo mismo ocurre con los empresarios, los tachamos de "fachas", "especuladores", "neocons"... aún sin conocerlos de nada, sólo por el mero hecho de tener más éxito que nosotros y haber llegado más alto en la vida.
5.- Pensamos que una vez conseguido el trabajo no hay que hacer nada más. Esto es completamente erróneo. Deberíamos pensar que el conseguir un trabajo es una oportunidad que nos da alguien para demostrar nuestra valía y poder así demostrarnos a nosotros mismos que realmente podemos llegar lejos. No sólo pueden ser ambiciosos los empresarios, sino también los trabajadores.
6.- Somos conformistas. Tenemos una casa, una mujer que nos quiere y unos hijos a los que adoramos. Somos felices y no necesitamos nada más. Sabemos que podemos llegar más lejos si queremos, pero estamos bien como estamos y ni lo intentamos. Esa mentalidad sería ridícula en países como Alemania donde, aparte del éxito personal, es igual de importante el éxito profesional.
7.- Porque pensamos que "Spain is different". Cuando alguien nos echa algo en cara siempre terminamos diciendo la frase como para justificarnos. Diferente no significa mejor, y tenemos que mejorar muchos procesos para poder competir en Europa. No somos más listos por hacer las cosas como las hacemos, ni tampoco más "pillos".
8.- Siempre intentamos echar las culpas al de "al lado". Casi nunca reconocemos nuestros propios errores. Necesitamos hacer "auto-crítica" y mejorar ciertos aspectos, tanto personales como laborales.
9.- "No es mi trabajo". Probablemente todos hayamos dicho esta frase alguna vez. Lo hacemos para intentar quitarnos responsabilidad en ciertos aspectos. No es una frase nada favorable en el ambiente de trabajo, pues realmente da la impresión de que los trabajadores son mercenarios. Aunque no sea tu trabajo, si ves que no es demasiado esfuerzo y puede ayudar a tu empresa no sería lógico negarse.
10.- No nos gusta que nos corrijan. Somos bastante soberbios y pensamos que siempre tenemos razón. Es necesario aceptar que hay gente que sabe más que nosotros en ciertos temas y que pueden ayudarnos a tomar mejores decisiones si les escuchamos.

Estas son 10 claves que según mi humilde opinión debemos mejorar si queremos ser competitivos en un mundo globalizado. Probablemente haya muchas más, pero me parece que las expuestas ya incitan a la reflexión.Me gustaría recalcar que ésta es una opinión personal, por lo tanto se podrá estar de acuerdo o no. Lo que no vería lógico sería lanzar insultos o descalificativos por el mero hecho de pensar diferente. Yo soy español y me siento muy orgulloso de serlo, pero a la vez soy consciente de que debemos mejorar muchos aspectos para crecer como país.

Fuente: Nostravia